Los presagios de negros nubarrones, con posibilidad de lluvia atenazaban a los organizadores horas antes de la carrera, pero el día se quiso aliar con los participantes, venidos de varios puntos de la geografía española, Salamanca, Badajoz, Cáceres, Toledo, Madrid, Portugal, y permitió que la prueba, que se puede decir ha conseguido alcanzar la madurez en su cuarta edición, se celebrase de forma esplendorosa.
Y es que este año, con un total de 512 inscritos, de los que cerca de 480 recogieron su dorsal, para finalizar un total de 424 corredores, han hecho que, sin duda alguna, se haya llegado a una cifra pocas veces imaginable en esta localidad.
Así, todos los corredores, iniciaron su salida de la prueba, con el pistoletazo, más bien el bocinazo, dado por el atleta moralo, de élite, Miguel Angel Gamonal. Se iban a enfrentar a los más de 21 kilómetros con un perfil más duro que las otras tres ediciones anteriores, al ser su principio y final en la localidad morala.
Así, comenzaron las primeras subidas por la Carretera de Millanes, donde el grupo se empieza a estirar y en cabeza se forma un grupo con el favorito Bruno Paixao, Carlos Gazapo, de Valencia de Alcántara, el talaverano Javier Nuñez, y el corredor del club organizador, Jorge Campos. Pero el luso parece no ser amigo de ir con nadie, y pasa en solitario por la meta volante, seguido a más de cien metros del valentino Carlos Gazapo; algo más rezadados, Jorge y Javier Nuñez van juntos.
En cuanto a las féminas, pronto se clarifican las posiciones. La vigente campeona, Raquel Gómez, pone un ritmo inaguantable para sus adversarias, y Cristina Durán aguanta a duras penas en segunda posición.
Parece que Bruno va camino de su tercer triunfo consecutivo en la prueba morala, pero cuando se llega al kilómetro 15, Carlos Gazapo alcanza al portugués. La lucha está servida.
Por detrás, un detalle que marcaría el final de la prueba. Javier Nuñez, en su afán de alcanzar a Jorge Campos, resbala y cae, antes de llegar al kilómetro 14. Jorge le espera, y se van juntos.
Mientras Raquel sigue con su carrera, con su fuerte ritmo, y Cristina Durán, empieza a sufrir, el recorrido, la distancia, se le hacen un poco duros. Por detrás, completa el podio, paso a paso, kilómetro a kilómetro, la exciclista, campeona del mundo, la salmantina Dori Ruano.
La bajada por la carretera de Valdehuncar, espectacular, mano a mano Carlos y Bruno, vigilándose, atacándose, emoción a raudales.
Y cuando se llega al interior de la población, por la Avenida de las Angustias, Carlos Gazapo se distancia unos metros, van a ser suficientes, va a ser insalvable la distancia para el de Portalegre. Y al final, aparece en la meta, en solitario, con una marca de 1:07:28, el valentino, CARLOS GAZAPO BRAVO; diez segundos más tarde lo hace Bruno Paixao. Tercero parece llegar Javier Nuñez, pero cuando faltan pocos metros para la llegada, se para a esperar a su compañero de batalla, Jorge Campos, y entrar, agarrados de la mano, en la meta. Todo un gesto de deportividad el demostrado por los dos corredores.
Completa el quinteto de honor de la prueba, el veterano corredor portugués Vitor Cordeiro, quien fuera vencedor de la I Media Navalmoral – C.N.A., allá por el año 1999.
Después, las chicas, primera, con un dominio casi insultante, RAQUEL GOMEZ MARTIN, que con un tiempo de 1:19:31, fue la 15ª de la general, todo un hito. Cristina Durán, mantiene el tipo, y a pesar de sufrir, llega a la meta con un tiempo de 1:27:06. Tercera, Dori Ruano, con un tiempo de 1:28:40. Cuarta es Silvia Benito Lara, y completa el cuadro de honor Mari Cruz Parra Morcillo.
Después de hablar de los grandes animadores de la prueba, los que vencen, hay que recordar a todo ese atleta popular, que entrena entre sus horas de trabajo, cuando la familia lo permite, que se hace sus kilómetros, a su ritmo, que es el verdadero artífice de las pruebas, que éstas existan, que tengan su sentido, porque son los que hacen posible que cerca de medio millar de corredores, con sus objetivos, con sus promesas, sean capaces de cruzar la meta, después de realizado un esfuerzo, y tener la satisfacción de haber cumplido un reto, un deseo, una aspiración, sin más ambición que su propia superación personal. Ese es el tipo de atleta al que se debe de orientar toda organización de una carrera, y al que hay que mimar, que es lo que entendemos hace este club, y los voluntarios que les ayudan, porque, no hay que olvidarlo, también somos corredores y sabemos los que se necesita, o al menos esa es nuestra intención y con esa idea trabajamos y seguiremos haciéndolo durante las próximas ediciones. Felicidades a todos los que habéis participado en esta carrera.
En el siguiente enlace os dejamos la clasificación general.
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